meditación en 2 segundos.


Hablen con sencillez:

Quiero    decirles   que   en   su   mente     están    firmes
algunas    cosas   que  les    impiden   penetrar  más en el
espíritu   de  quien  las  escucha   cuando hablan de Mí.  Y
Me urge mucho quitar estos obstáculos porque veo que han
aceptado con ardor Mi propuesta que les hice hace tiempo.
Por tanto, escúchenme.
Hablando   de   Mí  empleen   todas   las    palabras    que
se adapten  a  lo  que  su  mente  ve en el instante en que
hablan;    no    tergiversen  sino   conténtense   con   decir
simplemente     lo    que   ven.     El esfuerzo    de    hacer
accesible   su    pensamiento   al   que  escucha, lo admito
pero si,   a   pesar    del   esfuerzo,   no   logran    hacerse
entender,    callen;   porque  es mejor para ustedes y para
quien    los   oye.   No  suspendan  su  discurso  si ven que
quien      los       escucha     divaga.     Persistan,       pero
manténganse    sobre   ella   para   aproximarse  en cuanto
sea posible… como ya hacen.
Hijo    Mío,    considera     además   que    otro    obstáculo
en   tu   mente   es   creer  que todos aquellos con quienes
hablas,   tienen  tu  misma  mentalidad;  pero  no  siempre
es así.  Ten  justa   estima  de  los  dones que te He hecho
y  para  que  los  guardes  celosamente;  estos  dones  son
fruto de Mi amor por tí y serán tu corona y tu gozo.
Otro    obstáculo   que   tu   mente guarda,   representan
las   divagaciones  a  las  que  estás  sujeto a causa de la
vida     de   culpa   en   que   te   pusiste    cuando    hacías
compañía   al   maligno   en   las    veredas    del   infierno.
Optimas   ocasiones   estas   para  golpear  con sabiduría
al   tentador   que   vuelve  siempre más violento. Pues la
sabiduría   consiste,  en estos casos particulares, darte a
tí y a Satanás el más claro y rápido rechazo.    Pero     no
insisto    en   esto   porque  ya te He instruido. Te lo indico
para     ser     completo    en    la     enumeración   de   los
obstáculos   de  tu   mente,   que   se  contraponen  a  una
completa     sencillez   cual   es   la   que   quiero   de     tí.
Habla,    de   lo   que   Yo    manifiesto  a   tu   inteligencia,
sin   escuchar   observaciones   en   contra.   Por   lo demás,
Yo    te    mostraré   que   la   eficacia  de tus palabras está
asegurada por Mi amor.
(Libro la cruzada del amor; Sean sencillos como palomas
CA-2 6-enero- 96 Jesús)


Escuela de silencio.